Félix Ángel Moreno Ruiz

martes, 8 de diciembre de 2015

CUENTOS COMPLETOS de Juan Madrid

CRÓNICAS DE LA ESPAÑA NEGRA


Juan Madrid (Málaga, 1947) está considerado como uno de los más reputados cultivadores de novela policíaca en lengua castellana, ganador, entre otros, del XIV Premio Unicaja de Novela Fernando Quiñones en 2013 con Los hombres mojados no temen la lluvia. El escritor andaluz fue uno de los pioneros que, junto a novelistas como Julián Ibáñez, Andreu Martín y los fallecidos González Ledesma y Vázquez Montalbán, dieron dignidad literaria a un género que, a finales de los setenta y principio de los ochenta, era marginal en el panorama literario nacional y escasamente valorado por la crítica. Autor prolífico, con más de cincuenta obras en su haber entre novelas, libros de cuentos, narrativa juvenil y ensayo, es el creador de dos personajes inolvidables para los aficionados a este tipo de literatura: el comisario Flores ―protagonista de la serie Brigada Central, que alcanzó un gran éxito en televisión y de la que fue su guionista― y Toni Romano, un antiguo policía reconvertido en detective que recorre los ambientes más variopintos de Madrid mientras investiga sórdidos crímenes.

Con motivo del trigésimo quinto aniversario de la aparición por primera vez de Toni  Romano en la novela Un beso amigo (1980), Ediciones B ha decidido reeditar algunas de sus obras y ha comenzado con Cuentos completos, un libro publicado originariamente en 2009, que reúne la narrativa breve escrita hasta ese momento: Un trabajo fácil (1984), Jungla (1988), Crónicas del Madrid oscuro (1994), Malos tiempos (1995) y Vidas criminales (que no había sido editado hasta su inclusión en la recopilación). Este voluminoso libro de relatos ―ciento diecisiete, exactamente― contiene desde casos estrictamente policíacos hasta recreaciones literarias de los crímenes más famosos de la España de la transición democrática ―la matanza de Puerto Hurraco, el asesinato de los marqueses de Urquijo, el de tres novilleros en una finca de Albacete cuando toreaban a la luz de la luna o el crimen de Los Galindos―, pasando por galdosianas radiografías en negro de la sociedad madrileña y, por ende, de la española. También es variada su extensión, aunque predomina el cuento breve y algunos son solo apuntes expresionistas de lo más oscuro de la condición humana. En ellos, el autor no desdeña temas espinosos y duros como la pedofilia, el maltrato o las aberraciones patológicas, abordados todos con pasmosa sangre fría y sin contemplaciones. A pesar de que se trata de relatos escritos en distintas épocas, poseen, como nexos comunes, la maestría con la que están escritos, el dominio de las técnicas narrativas, la capacidad de atraer la atención del lector desde la primera línea, que no puede permanecer impasible ante la terrible realidad descrita en sus páginas.