Félix Ángel Moreno Ruiz

sábado, 27 de mayo de 2023

V 13. CRÓNICA JUDICIAL de Emmanuel Carrèrre

CRÓNICA DEL HORROR


El viernes 13 de noviembre de 2015, como si se tratara de una película americana de terror para adolescentes, un grupo de exaltados yihadistas sembró el pánico en la capital francesa llevando a cabo una serie de atentados suicidas. Lamentablemente, no se trataba de ficción, sino de una dantesca masacre que provocó la muerte de ciento treinta personas (incluidos algunos de los terroristas, que se inmolaron haciendo estallar los cinturones cargados de explosivos que llevaban adheridos a sus cuerpos) e hirió de gravedad a más de cuatrocientas. Aquellos ataques, los más terribles que sufría Francia desde el final de la Segunda Guerra Mundial, cuya autoría asumió inmediatamente el Estado Islámico, grupo paramilitar integrista que por aquel entonces ocupaba parte del territorio sirio e iraquí y que había mostrado delante de las cámaras de televisión sobradas muestras de su infinita crueldad (decapitaciones de periodistas extranjeros o cremación con gasolina de prisioneros encerrados en jaulas metálicas entre otras barbaridades), formaban parte de una cadena de atentados que asolaban el territorio europeo y que tenían la clara intención de provocar el caos y el desconcierto entre la población. De hecho, Francia ya había sido el escenario de otro ataque unos meses antes, cuando dos terroristas irrumpieron en la redacción del semanario satírico Charlie Hebdo, que había recibido amenazas de muerte por haber publicado unas caricaturas de Mahoma, y acabaron con la vida de varios periodistas que se encontraban en ese momento en sus instalaciones.
En septiembre de 2021, transcurridos casi seis años de los trágicos sucesos de la sala Bataclan (el atentado fue denominado así por ser en este lugar emblemático de la noche parisina, situado en el bulevar Voltaire, donde hubo un mayor número de víctimas), se celebró el juicio, que duró nueve meses y sentó en el banquillo a catorce acusados, de los cuales solo había un participante directo en los atentados, que no llegó a detonar el cinturón de explosivos que llevaba. Uno de los testigos de aquellas sesiones maratonianas fue el escritor y guionista Emmanuel Carrère (Paris, 1957), que redactó durante varios meses una crónica semanal para varios periódicos europeos, entre ellos, el diario español El País. Carrère, famoso por incluir en sus novelas elementos de no ficción y sus propias experiencias personales, ha reunido después del juicio todo el material escrito, al que ha añadido algunos artículos que no aparecieron en su día en la prensa, en un libro que ha titulado V13. Crónica judicial, que ha sido publicado en castellano por la editorial Anagrama. Dividido en tres partes (“Las víctimas”, “Los acusados” y “El tribunal”), V13 es más que un frío y detallado relato de aquellos terribles acontecimientos; es, también, una lúcida reflexión sobre la maldad y el fanatismo, sobre la compasión, la picaresca y el farragoso mundo judicial. 
Quien se acerque a V13 no encontrará respuestas, sino inquietantes interrogantes.

 

ALGÚN DÍA SERÉ RECUERDO de Marcos Giralt Torrente

LECCIONES DE VIDA


El madrileño Marcos Giralt Torrente es un destacado escritor de relatos y novelista, que ha obtenido importantes galardones como el Premio Herralde por París, el Nacional de narrativa por Tiempo de vida o el Ribera del Duero por El Final del amor. Su última obra es Algún día seré recuerdo, una miscelánea de textos de distinta naturaleza (desde artículos periodísticos a semblanzas biográficas, pasando por anécdotas, apuntes para escribir unas memorias o un diario personal, reflexiones, reportajes, epístolas y crónicas de viajes, entre otros), que han ido apareciendo desde comienzos del nuevo siglo en diversos medios de comunicación y publicaciones. Pese a ser un libro variado en los temas y heterodoxo en cuanto a su clasificación o adscripción a un determinado género literario, no deja de ser por ello una obra interesante, que nos permite acercarnos de una manera diferente a la acostumbrada a uno de los autores más influyentes de los últimos años, que cuenta con una producción literaria sólida y solvente. A través de la lectura de Algún día seré recuerdo, vamos descubriendo las inquietudes, los recuerdos, los gustos, las confesiones más insospechadas y las afinidades de Marcos Giralt, quien mezcla vida y ficción con absoluta maestría. Y todo ello, con un estilo sosegado y ameno, marca de la casa, que fluye con exquisita elegancia por sus cerca de trescientas páginas.