UNA SAGA MALDITA
Tras el rotundo éxito de Canto yo y la montaña baila, la escritora barcelonesa Irene Solà (Malla, 1990) regresa a la narrativa con Te di ojos y miraste las tinieblas. Escrita originariamente en catalán y traducida al castellano por Concha Cardeñoso Saénz de Mierea (que ha sabido preservar y transmitir acertadamente el ritmo de la autora y su desbordante léxico), narra la historia de una casa familiar, Mas Clavell, situada en lo más profundo del macizo gerundense de las Guillerías, a la que están asociadas las vivencias de una saga de mujeres de fuerte carácter y determinación, que, a lo largo de los siglos, la han habitado, dejando en cada uno de sus rincones sus recuerdos, sus miserias, sus anhelos, sus frustraciones. Influida poderosamente por el realismo mágico hispanoamericano y por el folklore de esta sierra abrupta y aislada, la novela está poblada de seres míticos (lobos feroces y terribles que devoran familias enteras, pastores, bandoleros, brujas, el demonio y sus secuaces), que, a lo largo de los años, han conformado un paisaje humano con su propia idiosincrasia. Irene Solà posee una imaginación desbordante y una ingente capacidad de fabulación que plasma en escenas donde lo truculento y lo escatológico se dan la mano con la violencia para crear estampas de una plasticidad que solo su particular estilo, basado en el ritmo sincopado y en la yuxtaposición sintáctica, es capaz de expresar de forma magistral y deslumbrante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario